En un post anterior reflexionábamos sobre lo que los medios hegemónicos entienden por "libertad de expresión", y una lectura de los diarios del domingo nos lleva a preguntarnos: ¿qué entienden algunos por "periodismo independiente", si es que tal cosa existe?
Leemos acá en Clarín como la Argentina se estaría yendo al descenso en la tabla mundial de inflación, colocada junto a los países más pobres del mundo; sin ninguna aclaración acerca de como impacta en el país esa inflación en los demás indicadores sociales, y como estamos ubicados en ese plano, a saber: aumento o reducción de la pobreza y la indigencia, del desempleo abierto y el subempleo, nivel de los salarios; no hay en la nota -por poner un ejemplo- la más mínima mención al impacto de la Asignación Universal por Hijo.
Al mismo tiempo, en La Nación de este domingo, Juan Carr, el creador de Red Solidaria -alguien a quien no se puede tildar de oficialista, ni acusárselo de estar manipulado políticamente- dice en un reportaje que en nuestro país "el hambre está a punto de ser derrotada".
Algo parecido sucede con el tratamiento de la protesta social por parte del Estado.
En un mismo diario se nos informa de la conmemoración de los tristes sucesos de diciembre del 2001 en clave de "caos en el tránsito", mientras se cuestiona la decisión del gobierno nacional -en línea con la política que se ha seguido desde el 2003- de que los efectivos de la Policía Federal no porten armas de fuego en las manifestaciones y protestas sociales.
En esto último al periodismo troglodita se suma la oposición que nos tocó, como Elisa Carrió y Gabriela Michetti, a quien nos presentaron como "el rostro humano" del macrismo, pero parece que necesita una urgente cirugía plástica (la de neuronas no está disponible por el momento).
Porque si algo dejan en claro los hechos de Villa Soldatti, es que los muertos no fueron fruto de que la Federal no portara armas de fuego, sino precisamente lo contrario.
En el mismo diario Michetti nos dice que está preparada para ser Jefa de Gobierno de Buenos Aires, y hemos de creerle pues cumple el manual PRO: usar apenas una parte del cerebro, el hemisferio derecho, que parece ser el de la represión.
Pero volvamos al "periodismo independiente", y preguntémonos como reaccionaría cualquiera de esos medios si se produjeran nuevas muertes en el marco de la protesta social, en un contexto en el cual la Policía Federal continuara portando armas de fuego en los operativos.
Todos podemos imaginarnos los títulos catástrofe, procurando conmocionar a los lectores y -como no- limar al gobierno de Cristina.
A menos, claro, que dejaran de hacer "periodismo independiente", y volvieran a hacer ésto:
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